Las terrazas y la primavera llenan Madrid por San Isidro

La primavera lleva ya semanas instalada oficialmente en Madrid y sus calles se han poblado de inmediato de terrazas donde disfrutar de toda su oferta gastronómica al aire libre. Con San Isidro asomando, el centro de Madrid se llena cada mediodía de amantes del tapeo.

La Puerta del Sol, Opera y la Latina conforman el triángulo más “gastronómico” del Madrid Antiguo, por lo que merece la pena perderse por sus callejuelas y esquinas para descubrir lugares como El Viajero de la Latina, El Nuncio, la Terraza del Platería, la Taberna del Alabardero o El Café de Oriente, entre muchos otros.

Son muchos los platos asociados desde hace décadas a la festividad de San Isidro. La tradición gastronómica de Madrid es mucho más que su cocido. Por supuesto, los calamares a la romana –sobre todo en bocadillo– y también del mar, las gambas al ajillo o rebozadas –gambas con gabardina– y el besugo a la madrileña.

La oferta es amplia, especialmente en el apartado de las tapas de las que destacan los boquerones en vinagre, el bonito en escabeche, los mejillones al vapor, las croquetas, la tortilla de patatas y las cazuelitas de callos. Como acompañamiento, el tradicional vermut o un vino de la región.  

Entre los platos más tradicionales que podrán degustarse en la pradera de San Isidro en sólo unos días, la oreja a la plancha, las gallinejas –fritura de vísceras de cordero– en otros tiempos muy populares, los caracoles con salsa (picante o no), las patatas bravas y los huevos estrellados.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!